Basándose en la información expuesta arriba, es posible
reconstruir hipotéticamente, la secuencia del primer asentamiento.
Se eligió Punta Cuevas porque es fácilmente defendible,
sin saber que no había agua en la cercanía inmediata
y por la existencia de roca fácil de trabajar, junto a una
playa abrigada. En la elección del sitio, también
puede haber influído la presencia de los restos del buque
encallado, que ofrecía materiales suplementarios. Debe retenerse
la posibilidad de que el paso previo por Patagones, o los ayudantes
que de allí trajeron, haya mostrado a L. Jones y E. Roberts
la factibilidad de construir refugios excavados, como las "Cuevas
de los Maragatos" de aquella localidad. Las excavaciones en
la roca se iniciaron dos o tres días después de desembarcar,
antes de hallar agua. Para aprovechar al máximo el esfuerzo
de cortar la roca, se decide excavar refugios y usar el material
extraído para la construcción de un galpón
( Tabla 3). Tres hombres trabajan una semana en picar piedra y transportarla
desde la punta hasta la playa. Dada la precariedad del transporte,
(arrastraban la piedra sobre un cuero de buey (ER1)), la distancia
no debía ser mayor de 200 ó 300 m. Quizás estos
bloques de tosca sean los ladrillos diferentes a los usuales que
fueron localizados en 1931 (GN). Una fuerte lluvia produce el llenado
de las lagunas, en el drenaje natural de la cuenca de Madryn, 4,4
km al N de Punta Cuevas. Al día siguiente, debido al revuelo
de las aves, se descubre la laguna, pero ya es tarde para pensar
en levantar nuevas construcciones, por lo que sólo se ubica
a los animales junto al agua. Allí se hace un corral y quizás
también una casilla precaria, para lo cual se desembarca
parte del material necesario, llevando el barco frente a este lugar.
En el primer lugar, en el fondo de la bahía, ya se habían
desembarcado maderas y chapas, que serán luego utilizadas
en terminar y techar las construcciones semi-excavadas en la tosca
y el depósito; también se aprovecharon los restos
del naufragio.
Lewis Jones y Edwyn Roberts probablemente supieran que Henry L.
Jones (CD1) mencionaba, ya en 1854, la existencia de la aguada temporaria,
pero en el recorrido previo al desembarco, cuando se navegó
unos días (dos días (ER2)) cerca de la costa en busca
de un lugar apropiado para desembarcar (ER1) no se la localizó.
Seguramente la laguna estaba seca entonces, como volvió a
estarlo a las pocas semanas de haberla hallado: El agua que había
en los charcos se secó pronto y a pesar de dar vueltas buscándola
por todas partes, no pudimos encontrarla (ER1) (Hasta la distancia
de un día de a caballo). (E. Mac Donald, com.pers.). Felizmente,
antes del arribo del contingente, la laguna volvería a llenarse)(ER2).
Cuando llega el Mimosa, el desembarco de la gente se produce en
donde está el campamento (en "Punta Galenses" hoy
Punta Cuevas).
Pudo haberse desembarcado en cualquiera de las playas situadas a
ambos lados de la punta . Como se vio (SH), las dos son aptas y
no hay información suficiente sobre este detalle. Sin embargo,
las descripciones del campamento hechas por los viajeros del Mimosa
(LH)(AM)(TJ), sugieren que lo observaron desde el mar, es decir
que habrían desembarcado por el oeste; lo mismo señala
el testimonio de Glan Camwy transmitido por L. Deodat (DE). De todas
maneras, ninguna de las dos alternativas queda a más de 500
m del campamento, situado sobre "Bahía Galenses"
en la cara oeste de la punta. El galpón y el pozo que construyó
Roberts deben haber estado en el sector de médanos aledaño
hacia el sur, no muy lejos de donde en 1995 se halló la sepultura.
"La hilera de cabañas" -por lo menos en parte-
son las excavaciones aún hoy visibles. Todo lleva a creer
que las cabañas, si bien estaban excavadas en la roca, debían
tener el frente de tablones de madera, colocados verticalmente.
Desde el mar no se veían como cobertizos sino como tablones
puestos en fila (BW). El techo de chapas y/o espartina o unquillo
(Sporobolus rigens), podía ser fácilmente soportado
por esta pared frontal y por la roca en la pared opuesta. La excavación
mejor conservada (la primera empezando del norte), conserva la base
de la pared frontal, labrada en la misma piedra. Cuando se produce
el desembarco, no todas las casillas estaban listas sino ...a medio
levantar y fueron terminadas en los días siguientes (LH).
Los carpinteros estaban ansiosos por juntarse con los materiales
para hacer casas, que habían traído de Liverpool..
(TJ). Richard Berwyn coincide con esto cuando afirma que los carpinteros
terminaron las quince casas que había empezado Edwyn Roberts
y sus peones.(RB1) Como la hilera de casillas tenía unos
100 m de largo según (TJ) y los restos visibles en la actualidad
ocupan casi 80 m, se deduce que si hubo viviendas pre-fabricadas
fueron muy pocas. En todo caso, la superficie cubierta preparada
antes del desembarco, bastaba para albergar a todo el contingente
(Tabla 3), más aún si se incluye el depósito,
en el cual consta que se alojó gente (TJ).
El detalle de la buena conservación de la casilla descripta
por Lambert en 1881 (CL), permite suponer que por lo menos una de
las excavaciones se mantuvo "montada" para ocuparla temporariamente.
El testimonio de Glan Camwy citado por Trespailhié (OT) es
claro en este sentido:...se trata de un par de habitaciones que
según parece de 1865 a 1887, sirvieron de habitación
a los enviados de las autoridades de la colonia, para recibir correspondencia,
carga y pasajeros que llegaran a estas playas. En 1932, L. Deodat,
acompañado de Glan Camwy ya anciano, visita la excavación
de muebles labrados en la pared, distinguiendo dos pequeñas
hornacinas casi al ras del suelo y al frente, sobre el muro posterior,
un remedo de alacena... dos umbrales a ambos lados... y una tosca
escalera de tres peldaños... (DE). De acuerdo con esta descripción,
se trataría de la excavación n°2, que tiene sus
paredes trabajadas y restos de la escalera.
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