ROBERTO GOIJMAN (Poeta y editor - 1953)
Este porteño que desde 1983 reside en Trelew es un activo difusor de la palabra poética con un concepto social y político que transita crudo y a empellones por sus frases. Actualmente es el director responsable de un bello proyecto editorial llamado Patagonia/Poesía, "Para la yema del cráneo y el ojo". Se trata de un periódico de difusión de la poesía patagónica cuyas características son tan singulares como profundas. Fue secretario general del sindicado gráfico a partir de 1985. Como titular de la asociación vecinal de barrio Etchepare fue elegido presidente de su junta electoral en 1996. Roberto Goijman fue coordinador de diversos talleres literarios para jóvenes. Vivió exiliado en Asunción del Paraguay durante la última dictadura militar. El lenguaje de su trabajo lírico es directo, fuerte, sin eufemismos. En "La vereda rota" (libro al que pertenecen los poemas que hoy se publican) hay un aire lejano de Charles Bukowski que lo trasunta y lo sostiene. Goijman es un agente multiplicador de las letras patagónicas y un activo protagonista de jornadas y encuentros en donde la poesía presenta sus mejores credenciales. Obra: "La vereda rota" (1996); "Sobre la oscuridad" (inédito); "Flacas" (inédito); "Poesía Pretrificada" (inédito).

EL OTRO PAIS

Son las mismas marcas en los mismos productos
son las mismas señas en las mismas señales.
Es el mismo habla en las mismas habladurías
es el mismo asfalto, en distintas calles
con los mismos nombres.
Pero aquí no hubo trolebuses, ni tranvías,
ni mucho menos adoquines.
Sin embargo a pesar de la distancia
siempre dijeron que las leyes y derechos
eran los mismos
que teníamos los mismos colores y monedas
y que por eso nos descontaban la misma
deuda externa

ABRIRME

Puedo masticar el pensamiento,
bárbaro, salvaje del futuro
y abrirme el pecho,
cobijarte,
y que no sientas frío...

SIN LEYES

La angustia y la esperanza
acompañan a las horas
no es mucho lo que falta
pero el tiempo se hace eterno.
Que largo camino falta
una recorrida lenta por la inmensa Buenos Aires
Un trayecto sin escalas a Mar del Plata
o un turno y medio de hotel
con el guiño del encargado.
La hora quiere y no pasa
sin embargo el viento viaja
a contramano, sin leyes, sin
señales, sin que nadie
se le atreva y diga nada.

PEQUEÑECES

Caminando te encontré
y fue
la locura, el placer
un poema en el café.
Y fue
la locura, el placer
un poema en el café
caminando te encontré.
El placer
un poema en el café
caminando te encontré
y fue.
Caminando te encontré
y fue
el placer
un poema en el café
la locura.
La locura
el Placer en un poema
el café
fue caminando
y te encontré.

LA NOCHE

Y volaron ...
chapas/cabezas/alambres/zapatos,
cubiertas/tejidos/relojes/asientos,
peinetas/manijas/cordones/tornillos,
botones/alfombras/hilados,
revistas/carteras&}/anteojos,
monedas/arrugas/sonrisas/llantos,
mirada/sueños.../palabras,
uñas y dientes/huesos y venas.
La noche se hizo pedazos ...
carnaval de cosas esparcidas,
esqueletos de letras preguntando
por su nombre.